Vestida con mantos negros le llegó a Lorca la muerte. Por marica y por poeta se lo quitaron de en medio aquellos que en las mentes solo conservaban serrín y un águila negro que batía las alas.
Tanto tiempo entre los versos que quisieron tenerte muerto cuando desaparecía la luna gitana y la luz del alba se abría. Cobardes aquellos que dispararon para enmudecer tu aliento, cobardes y malnacidos quienes te vendieron al viento.
Con la sombra en la cintura seguiremos soñando desde la baranda que entre sonrisas y llanto aparezca la justicia que jamás debe de ser olvidada.
Quisieron negarte y después de tanto tiempo aquí sigo como amante de tus letras, como sigue el barco en la mar o el caballo en la montaña soñando con las rimas que nunca podrán ser borradas.
Dibujo de F.G. Lorca |